Las tardes de otoño me recuerdan a ti
Los bosques se encuentran en la oscuridad, se desvanece día
los bordes de las colinas en los halos de color rojo.
En una cabaña cerca de un bebé que llora.
El viento va en pasos posteriores
a través de los troncos para recoger las últimas hojas.
Luego sal, acostumbrado a estas alturas a las miradas de larga preocupado,
el extraño solitario luna creciente
con su penumbra de tierras desconocidas.
Si se va el frío, indiferente, por su trayectoria.
Su luz envuelve a los bosques, las cañas, el estanque y la ruta
con la melancolía de halo pálido.
Incluso en las noches de invierno sin luz
cuando las ventanas girando danzas de escamas
y el viento de la tempestad, que a menudo tienen la impresión de que le mira.
El piano canta poderosamente engañosa
y su profunda y sombría voz de contralto
habla a mi corazón. Usted la más cruel de las mujeres hermosas.
Mi mano se aferra a veces la lámpara
y su luz suave que pone en una gran pared.
Desde el antiguo marco de su imagen se ve oscuro
me conoce y me sonríe de forma extraña.
Pero yo besaré tus manos y el pelo
y susurrar su nombre.
*Isabella
No hay comentarios:
Publicar un comentario